DE CABALLEROS Y DONCELLAS y en aquel momento entró él en sus aposentos
como un cuento de caballeros y doncellas
buscando los labios encarnados de la joven doncella a la que tanto deseaba
-mi caballero.. que van a pensar de esto? acaso vos no sabe que voy a ser desposada dentro de dos semanas?
-mi dulce doncella... no pienses mas...y dejemos desatar esta pasión...
Sonrojada la doncella, temía mirar a los ojos a su caballero cuando el la tenía entre sus brazos...
-tanto deseo esos labios y ese frágil cuerpo, que, aunque solo sea por hoy, deseo hacerlos míos.
-pero no es correcto, mi caballero... estos labios y este cuerpo han de ser besados por mi amado que me espera dentro de pocos días....
-no pienses mas, acaso no me deseas?
-si le dijera que no le deseo, le mentiría...
-entonces déjame que bese esos dulces labios...
La doncella ruborizada empezó a dejarse llevar por su caballero que besó sus labios mientras acariciaba su cuello, unidos en un tierno y apasionado abrazo a la vez...
Tal era la pasión entre los dos, que la doncella fue entregándose poco a poco y cayó rendida en los brazos de su caballero...
Recostados, retozando entre las blancas sábanas de hilo, iban desatando mas y mas su pasión, clandestinamente, dejando a un lado los temores... intercambiando besos, miradas cómplices,suspiros, caricias y haciendo de dos cuerpos uno...
momentos carnales, llenos de lascivia, que humedecían mas sus cuerpos, sus deseos eran mutuos, y sus cinco sentidos estaban a flor de piel...
-Mi amado caballero...
-Mi adorada doncella, este cuerpo ha de ser mío por siempre
La doncella asentía con la respiracion agitada, entre suspiros y gemidos...
y mientras tanto el caballero la hacía mas suya convirtiendo esa suave danza amatoria en un torbellino de pasión desenfrenada, hasta que la doncella se rindió entre sus brazos exhalando un último y culminante suspiro de placer al igual que el caballero... un abrazo, unos momentos de suaves caricias y un sudor compartido en las blancas sabanas de hilo...
como un cuento de caballeros y doncellas
buscando los labios encarnados de la joven doncella a la que tanto deseaba
-mi caballero.. que van a pensar de esto? acaso vos no sabe que voy a ser desposada dentro de dos semanas?
-mi dulce doncella... no pienses mas...y dejemos desatar esta pasión...
Sonrojada la doncella, temía mirar a los ojos a su caballero cuando el la tenía entre sus brazos...
-tanto deseo esos labios y ese frágil cuerpo, que, aunque solo sea por hoy, deseo hacerlos míos.
-pero no es correcto, mi caballero... estos labios y este cuerpo han de ser besados por mi amado que me espera dentro de pocos días....
-no pienses mas, acaso no me deseas?
-si le dijera que no le deseo, le mentiría...
-entonces déjame que bese esos dulces labios...
La doncella ruborizada empezó a dejarse llevar por su caballero que besó sus labios mientras acariciaba su cuello, unidos en un tierno y apasionado abrazo a la vez...
Tal era la pasión entre los dos, que la doncella fue entregándose poco a poco y cayó rendida en los brazos de su caballero...
Recostados, retozando entre las blancas sábanas de hilo, iban desatando mas y mas su pasión, clandestinamente, dejando a un lado los temores... intercambiando besos, miradas cómplices,suspiros, caricias y haciendo de dos cuerpos uno...
momentos carnales, llenos de lascivia, que humedecían mas sus cuerpos, sus deseos eran mutuos, y sus cinco sentidos estaban a flor de piel...
-Mi amado caballero...
-Mi adorada doncella, este cuerpo ha de ser mío por siempre
La doncella asentía con la respiracion agitada, entre suspiros y gemidos...
y mientras tanto el caballero la hacía mas suya convirtiendo esa suave danza amatoria en un torbellino de pasión desenfrenada, hasta que la doncella se rindió entre sus brazos exhalando un último y culminante suspiro de placer al igual que el caballero... un abrazo, unos momentos de suaves caricias y un sudor compartido en las blancas sabanas de hilo...
